Las dimensiones del salón de la “Casa de la Cultura” lo hacían previsible, pero no por eso resultó menos impactante: el espacio fue escaso. Tales las expectativas por ver (y oir, por supuesto) a pequeños violinistas y pianistas de apenas cinco años de edad, junto a flautistas o percusionistas de más de cuarenta.
El Concierto Anual que la Escuela Integral de Música organizó este domingo 8 permitió tener un pantallazo de qué cosas están ocurriendo con la música, en esta institución en particular y en Zárate en general. Y lo que ocurre no es poco: con apenas tres años de iniciación de los cursos (que se brindan tanto para socios como para los que no lo son) han pasado (y lo siguen haciendo) estudiantes de violín, contrabajo, trompeta, saxo, trombón, flauta, piano, percusión, y “se mantiene activa la vigilia para desarrollar nuevos instrumentos en cuanto la ocasión lo permita”, como señala el músico Raúl De Paoli, Coordinador de la Escuela.
Quienes soportaron, primero, el intenso calor de la jornada y la inclemente tormenta posterior, fueron premiados con más de una hora y media de música en las más variadas formaciones: solos, duos, tríos, cuartetos y un “tutti” final a todo carnavalito, donde la Casa de la Cultura tuvo, luego de su inauguración oficial del 24 de noviembre del año pasado, su merecido “bautismo de fuego” musical.
Mientras continúan algunas actividades para posibilitar que sigan estudiando durante el verano aquéllos que así lo deseen, la Escuela Integral de Música ya imagina un 2014 a puro crecimiento.
